Hace algo más de un año un post de Jordi Martí (@xarxatic) a raíz de las sombras de nuestro Grey particular, me dejó varios días cavilando en un post que pretendía sugerir otras 25+1 sombras educativas (por completar el número redondo del título del famoso libro, y la no tan famosa película). Pero como tantas otras veces, una mezcla de vergüenza y pereza lo condenó al limbo de los borradores.
Hoy encuentro otro post suyo que me despierta las ganas de escribir, así que antes de que se me pasen vamos al tema (antes de seguir pásate por el blog de Jordi para saber de qué va esto).
Afirmo que… https://t.co/2ZDniWc5Wm— Jordi Martí (@xarxatic) 4 de marzo de 2016
Apostillo, con cierto pudor, que:
-En educación no sólo es conflictivo el alumnado: también lo son los claustros, los centros, la normativa,… Y no, no creo que haya dos tipos de alumnos conflictivos, ni no-conflictivos; ni tampoco creo que haya dos tipos de docentes. Por suerte la realidad es lo suficientemente compleja como para escapar a dicotomías.
-El coordinador TIC suele ser uno de los pringados del centro. Nótese que en esa afirmación se entiende que no el único.
-El sistema de acceso a la docencia pública es muy mejorable (algún día me detendré en este tema); en muchos centros privados directamente no hay sistema.
-Los comedores escolares no deberían estar gestionado por el centro… sino por el propio alumnado. ¿Por qué no se aprovecha el potencial educativo al tiempo que se da un servicio como ese? Eso sí que sería un aprendizaje basado en un proyecto real y con relevancia social.
-Ajustar el lenguaje al destinatario es una obligación comunicativa: sea una charla universitaria, o una clase en un aula de primaria. Por cierto, el asunto de los títulos de algunas ponencias, ¿responde a alguna perversión psicológica?
-En infantil y primaria, como mínimo, debería haber menos asignaturas… o incluso una sola (denominémosla provisionalmente «vida»). Ah, y algo a lo que no me atreví este curso: una sola libreta.
-Ni las familias eligen los centros por cuestiones educativas, ni los docentes por cuestiones pedagógicas. No tengo claro cuál de las dos cosas es más lamentable.
-De acuerdo: la formación del profesorado no es la que la importancia de la tarea merece. Pero no sólo la continua, actualmente hasta hiper-ofertada, sino también la inicial.
-Las jornadas y calendarios suelen esconder razones más prosaicos que educativos. Lo mismo pasa con el transporte escolar en algunos contextos, en donde la empresa de autobuses es un condicionante mayor que el manual de pedagogía.
-En mi opinión las lenguas están al servicio de la comunicación, no deberían ser las protagonistas de una lucha escolar.
-Muchos funcionarios públicos de diversos sectores apuestan por el sector privado en distintos ámbitos, no sólo en educación. En algunos casos tendría una razón de ser… pero debería ser excepción, no norma.
-La tecnología es lo que nosotros hacemos que sea, en educación y en cualquier campo. Bueno y malo son conceptos morales que a ella no le incumben.
-El divorcio políticos en las alturas vs trabajadores al pie del cañón se da en todos los sectores. Basta charlar un rato con profesionales de otros campos para percatarse
-Una de las primeras cosas que deberían hacer las universidades es autocrítica.
-Los libros te texto no molan. Llamarle educación a lo que pasa en las escuelas e institutos tampoco: eso es otra cosa.
-Mientras el inspector actúe, o se siga viendo, como el guardia civil que te pide la documentación y te multa, en vez de como el agente que te ayuda en caso de accidente, mal irá el asunto. Tanto los docentes como la inspección deberían cambiar cosas para que esto no siga pasando.
-Me resulta muy difícil saber qué es un buen o un mal docente. De hecho, a lo mejor ni siquiera existe tal diferenciación.
-Todo docente debería ser tutor en mayor o menor medida… y dicha tutoría debería ejercerse como tal, y no convertirse en un pasar el rato.
-Si algo es público, la gestión de los recursos (económicos, materiales, humanos,…), también debería serlo. Resulta hasta obvio.
-Como con los docentes, no tengo claro que se pueda afirmar que un centro sea mejor que otro. ¿Cuándo y en base a qué?
-En muchos artículos, publicaciones, presentaciones, etc., de las que pueblan la red, las bibliotecas, y diversos foros educativos, aprecio principalmente un contenido: currículum oculto. Lo que no quita para que haya otras que valgan mucho la pena, claro está.
En resumen, sólo unas humildes apostillas sobre las que hacer girar algunas reflexiones.
Como siempre tan acertado con tus apreciaciones y por ello te animo a que no dejes más comentarios en el baúl de "para mañana". Así nos ayudarás a los que te leemos a tener una visión cada vez más clara de por donde tirar en este complicado mundo de la educación, donde navegamos tantas veces a la deriva. Gracias por compartir, gracias por decir, gracias .
Son muchas las cosas de ese baúl, pero como tu bien sabes, entre el monte (bendito refugio), otros blogs, cursos, y demás familia… poco tiempo queda.
Gracias a ti por tus palabras y por pasarte. Y visita el blog de Jordi, que el si que escribe casi a diario, jeje.
Un saludo.