Aprovechando un cursito sobre resolución de problemas en plan design thinking (de iniciación pues es formato NOOC), me paro a pensar en lo útil que es para cualquier equipo profesional que tenga que lidiar con distintos proyectos el contar con alguna herramienta que permita sistematizar y coordinar los innumerables elementos que implicarán: documentos, calendarios, comunicaciones… Y es que habiendo tecnología que permita gestionar algunos de esos aspectos de forma sencilla, con mayor control, y con complementos enriquecedores, es una tontería tener que estar todos presentes al mismo tiempo, andar con correos de ida y vuelta, escribir versiones de versiones de documentos, etc.
Por cierto, aunque no es el objeto aquí, ese esquema está hecho con otra app que uso bastante en los últimos meses: Coggle.it. Con un sistema y una interfaz muy originales, pero de uso sencillo, resulta útil para hacer esquemas y mapas mentales de forma rápida.
Pues para el caso de los centros educativos y de los equipos directivos la mejor que he probado es Trello porque tiene un funcionamiento bastante completo e intuitivo, siguiendo el conocido modelo Kanban, aunque también vale para usar otros sistemas. Funciona a través de tableros, a los que se añaden listas, en las que a su vez se crean tarjetas. Por supuesto, todo es personalizable, y las funcionalidades son bastante completitas: compartir, crear etiquetas, asignar tareas, incluir documentos o listas de control, gestionar calendario y fechas límite…
Estaría muy bien que las consejerías de educación dotasen de una herramienta similar a sus centros, ya que no solo les facilitarían el trabajo y la coordinación, sino que incluso podría servir para hacer más fácil y sencilla la supervisión y evaluación del centro.